Un vaso de plástico, un recipiente ligero y resistente diseñado para contener bebidas sin romperse como el vidrio. También conocido como vaso descartable, es esencial en fiestas, eventos al aire libre, oficinas y restaurantes donde la seguridad y la practicidad importan más que el lujo. Pero no todos los vasos de plástico son iguales. Detrás de ese aspecto simple hay distintos materiales, cada uno con sus propias reglas de uso, durabilidad y reciclaje.
El polipropileno, un plástico duro, termoresistente y seguro para alimentos. También conocido como PP5, es el que encuentras en vasos que soportan líquidos calientes sin deformarse. Lo reconoces por el símbolo de reciclaje con el número 5 dentro. Es el favorito de bares y cafeterías que sirven té o café en vasos de plástico. Luego está el PETG, un plástico transparente que imita el vidrio sin su fragilidad. También conocido como plástico de alta claridad, se usa en vasos de eventos donde quieres que luzcan elegantes, pero sin el riesgo de roturas. Y si buscas algo aún más rígido y brillante, el acrílico, un material que parece cristal pero es mucho más resistente a los impactos. También conocido como plexiglás, lo usan en hoteles de lujo o bodas donde el diseño importa.
La diferencia entre estos materiales no es solo de aspecto: afecta cómo los guardas, qué puedes servir en ellos y cómo los reciclas. El polipropileno se puede lavar y reusar varias veces sin perder forma. El PETG se rompe si lo doblas, pero no se astilla. El acrílico se rayan con facilidad, pero su brillo es imbatible. Y si ves un vaso que parece de cristal pero no suena como tal cuando lo tocas… probablemente sea uno de estos. No es magia, es química aplicada a la mesa.
Lo que encuentras aquí no es una lista de productos, sino una guía práctica para entender qué tienes en las manos cuando eliges un vaso de plástico. Saber identificar el material te ayuda a evitar riesgos, a reciclar bien y a no pagar de más por un diseño que no cumple lo que promete. Ya sea que organices un evento, gestiones un negocio o simplemente quieras saber por qué algunos vasos se vuelven blancos con el calor y otros no, aquí encontrarás respuestas reales, sin tecnicismos innecesarios. Lo que sigue son artículos que profundizan en cada tipo, cómo reconocerlos, cuándo usarlos y cómo cuidarlos para que duren más de lo que crees.
Un vaso de 8 no tiene 8 ml, sino 237 ml. Descubre por qué los vasos de plástico duro se miden en onzas, cómo diferenciarlos de los de 250 ml y cómo medir su capacidad real para evitar errores en casa o en tu negocio.